Hombres y mujeres rendidos a las bajas pasiones, amparados
por la oscuridad de la noche, dan rienda a ese ser reprimido de su interior.
Música, baile, perfumes y alcohol anestesian hasta a los más beatos, los mismos
que con la luz del día alardean de los buenos modales y la sofisticada educación.
Todas las gentes pierden sus roles de alta cuna o baja condición convirtiéndose
en una misma masa que buscan la diversión. Pasen y disfruten, esta es solo otra
noche más en el cabarete “Amour”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario